El globo de fabricación casera que durante horas planeó por los cielos de Colorado (EE UU) aparentemente con un niño de seis años a bordo, ha aterrizado finalmente pero sin nadie en su interior. Al parecer, el aparato se había elevado inesperadamente mientras el padre del niño trabajaba en él, tomando gran altura y velocidad.
Las autoridades habían desplegado un dispositivo médico para atender al pequeño cuando tocase tierra el globo, pero no fue necesario. Se desconoce la suerte del menor.
El globo, con forma de platillo volante, podía llegar hasta los tres mil metros de altura, según ha indicado la portavoz del sheriff, Eloise Campanella. Los medios de comunicación, especialmente las televisiones de EE UU, se han volcado en la cobertura informativa del suceso.
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